PARIS. La basílica del Sagrado Corazón de París, una
iglesia en piedra blanca erigida sobre la colina de Montmartre y uno de
los grandes enclaves turísticos de la capital francesa, fue profanada
hoy con pintadas antirreligiosas.
"Ni Dios ni Estado" o "Fuego a las capillas" son algunas de las inscripciones que podían leerse hoy en los muros de la fachada, la puerta y el interior de la basílica construida en 1873.
El alcalde de París, Bertrand Delanoë, condenó a través de un comunicado esas "degradaciones (...) inaceptables", que no son las primeras que sufre el monumento.
"Espero que sus autores sean identificados y detenidos rápidamente", agregó el responsable del consistorio parisino, que trasladó su apoyo "al conjunto de los católicos parisinos" tras la profanación de una basílica edificada como símbolo del nuevo orden moral tras el movimiento insurgente conocido como la Comuna de
París.
El suceso, ocurrido a cuatro días de la primera vuelta de las elecciones municipales, ha suscitado también la condena de los candidatos del Partido Socialista, la Unión por un Movimiento Popular y el Frente Nacional.
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