ORACIÓN
Señor, Dios misericordioso, que muestra amor y paciencia hacia los pecadores, que haga penitencia por el perdón de mis pecados, ayúdame a convertirme y dar frutos; Tú que eres el que eres y sales a mi encuentro, que yo no busque en la fe un apoyo para una falsa seguridad. Por Jesucristo nuestro Señor. Amén.
DOMINGO III DE CUARESMA O DE LA INSEGURIDAD.-
Color morado
MISA (A):
Propio; sin Gloria; Credo; Oración de los Fieles Propio; Prefacio II de Cuaresma; Plegaria Eucarística II; Oración sobre el Pueblo.
LITURGIA DE LAS HORAS:
Invitatorio: Salmo 23; Himno propio del domingo de Cuaresma; en el Oficio de Lectura: Te Deum; Domingo III de Cuaresma y Domingo III del Salterio; si hay un ministro ordenado hace la bendición solemne, no. 1.
LECTURAS BÍBLICAS:
Éx 3,1-8a.13-15;
Sal 102,1b-2.3-4.6-7.8 y 11 (R/: 8a);
1 Cor 10,1-6.10-12;
Versículo: Mt 4,17;
Lc 13,1-9.
OFICIO DE LECTURA:
Año 1: Heb 1,1~2,4.
Patrística:
De los tratados de San Agustín, obispo, sobre el evangelio de San Juan (Tratado 15,10-12.16-17; CCL 36,154-156).
COMENTARIO A LAS LECTURAS DE LA MISA:
En la mitad de la Cuaresma, el evangelio es una invitación fuerte a la conversión. Todos somos pecadores. No menos que los que fueron ajusticiados por Pilato, o los dieciocho muertos al caerles encima la torre de Siloé, según explican a Jesús: todos debemos convertirnos. El Señor lo explica con la parábola de la higuera, donde se pone de manifiesto la paciencia del propietario, hasta el punto de conceder al árbol una última oportunidad «a ver si da fruto en adelante». El propietario, delicadamente, pone los medios a favor del árbol: cava a su alrededor, echa estiércol... Es una gracia última que el árbol, hasta ahora parásito, no ha merecido. Dios es infinito pero la vida del hombre es finita: el hombre sólo tiene su existencia para dar fruto, y debe colaborar en todas las oportunidades que la gracia le ofrece. En la primera lectura, uno de los textos más relevantes del Antiguo Testamento: la revelación del nombre de Dios. Por el misterio de Jesús sabremos que Dios es fuego de amor, que nunca se consume: Dios Trinidad. Descubriremos que en el espacio abierto entre el Padre y el Hijo en el amor del Espíritu Santo están el universo, la historia y nuestras existencias.
La segunda lectura es importante y describe la interpretación cristiana del Antiguo Testamento. Hoy no puede cantarse otro salmo más apropiado que el salmo 102, un poema de la misericordia divina: «El Señor es compasivo y misericordioso».
NOTA LITÚRGICA:
Es recomendable iniciar las Misas con las letanías de los santos en lugar del acto penitencial (cf. Cæremoniale episcoporum, núms. 260-261). Si se canta estas letanías, al final de las mismas el celebrante desde la cede, omite todos los ritos introdutivos reza la colecta (sin decir previamente oremos).
RITUAL DE INICIACIÓN CRISTIANA DE ADULTOS:
Rito del Primer Escrutinio (núms. 152-166).
CALENDARIOS PARTICULARES:
Rito Hispano Mozárabe:
Domingo III de Cuaresma: el ciego de nacimiento (morado).
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